Entre completos y sesión de fotos: así fue la presentación del nuevo uniforme deportivo del Club Cristo Vive

“El Club lo hacemos todas y todos”. Esa frase, sencilla pero profunda, resume el espíritu de la jornada vivida este martes 22 de julio en el gimnasio Cristo Vive. Más de 70 personas —entre niños, niñas, familias, profesoras, voluntarios y compañeras/os de Fundación Cristo Vive— se reunieron para compartir un momento de alegría, comunidad y orgullo barrial.

El hito principal fue la presentación oficial del nuevo uniforme del Club Social y Deportivo Cristo Vive, confeccionado por la marca nacional Playmaker. Gracias al proyecto adjudicado por el fondo Comunidad Activa 2024 del Gobierno de Santiago, fue posible adquirir camisetas, balones y equipamiento para seguir fortaleciendo el deporte como herramienta de inclusión y desarrollo.

“Esta jornada fue un gesto concreto de lo que creemos: que el deporte no es solo entrenamiento, sino comunidad, amor y justicia social. Cada uniforme entregado es también una invitación a sentirse parte”, señaló José Bezanilla, coordinador del Club Social y Deportivo Cristo Vive.

Las emociones se multiplicaron cuando cada niño y niña de la rama de fútbol vivió su momento especial frente a la cámara, en una sesión fotográfica pensada con cariño y creatividad por la fotógrafa Bárbara Zambrano. Las familias, emocionadas, sacaban fotos y grababan orgullosas a sus hijos/as mientras posaban con la nueva indumentaria.

Como acompañamiento, celebramos la convivencia “La Mesa del Club”, una completada fraterna hecha posible gracias a las donaciones de PF Alimentos, que aportó vienesas, pizzas y otros insumos para compartir. Las apoderadas también sumaron sus manos y alegría para preparar cada uno de los completos que dieron sabor a la jornada.

Estuvieron presentes nuestras tres ramas deportivas activas: fútbol, patinaje y boxeo. Algunas vivieron primero sus entrenamientos habituales, y luego se sumaron a esta fiesta del deporte barrial.

Las profesoras Cindy Silva y Esperanza Hernández, junto a las internas de nutrición Fernanda Verdugo y Josefina Escobar, fueron clave en la organización del evento, asegurando el orden, la logística y el cuidado de los niños y niñas.

El momento más emotivo lo marcó la presencia de la Hermana Karoline Mayer, quien entregó un mensaje espiritual a las familias, recordando que “cuando niños y niñas comparten y sus familias se integran, esto demuestra que Dios está en el deporte también”.

Agradecemos especialmente a las alianzas que hicieron posible esta jornada:

• PF Alimentos, por su aporte generoso en alimentos..

• Gobierno de Santiago, por financiar la implementación deportiva a través del Fondo Comunidad Activa.

• SOMOS Equidad, quienes acompañan a nuestras profesoras en formación con enfoque en diversidad, equidad e inclusión.

• Escuela de Nutrición U. de Chile, desde donde se brindan herramientas para una vida saludable a través de estudiantes internas que acompañan a las familias.

• Fundación Clubes, organización con la que tenemos un convenio de colaboración que impulsa este proyecto.

El deporte transforma cuando se vive en comunidad.Y en Cristo Vive, el deporte también se celebra compartiendo un completo.